A medida que las empresas se esfuerzan por reducir costes y hacer negocios de forma más rentable, es posible que algunas prioricen el ahorro a expensas de la seguridad y la salud en el trabajo. Esto, como es obvio, es contraproducente a largo plazo y puede generar inconvenientes y pérdidas de dinero y de reputación que echarían por tierra todo el ahorro obtenido.
Para cualquier compañía, más aún si sus trabajadores desempeñan su labor en la carretera, la seguridad debe ser lo primero. Sin embargo, hay formas de ahorrar costes y, al mismo tiempo, mejorar la salud en el trabajo, aumentando la seguridad de los conductores.
Es más, la mejor manera es también la más sencilla: potenciando un estilo de conducción responsable se contribuye a ahorrar una cantidad nada desdeñable en combustible, se ahorra en mantenimiento y se reducen las primas de seguro.
Pero… ¿cómo conseguir que los trabajadores conduzcan de forma más segura y eficiente? Aquí la telemática ha supuesto un antes y un después. Con la tecnología moderna de gestión de flotas es posible monitorizar el estilo de conducción, registrando maniobras bruscas o excesos de velocidad. Estos datos pueden ser utilizados para identificar problemas y ponerles remedio con cursos de formación específicos. También pueden ser utilizados para comparar los resultados de unos conductores con otros y premiar a aquellos que se comporten al volante de forma más responsable.
Mantener resultados a largo plazo
Conseguir que el estilo de conducción mejore y se mantenga en el tiempo, requiere abordar distintos desafíos, como por ejemplo, las respuestas emocionales de los conductores. La formación, por tanto, no debe limitarse a una única sesión, sino que es importante que se mantenga una continuidad y que se adapte a los requisitos de cada conductor.
Además, se necesita un compromiso significativo de los empleados. Si éstos no están comprometidos, no pueden mantenerse motivados. Aquí entra en juego la gamificación. Es decir, la utilización de mecánicas de juego para motivar a los conductores y fomentar un estilo de conducción más seguro.
El uso de esta práctica está siendo cada vez más potenciado por las empresas, que utilizan nuestra tecnología y los datos aportados por nuestras soluciones para poner en marcha proyectos de gamificación con muy buen resultado.
La conclusión es que los conductores deben comprender la importancia de sus acciones en la carretera y recibir la orientación adecuada sobre el uso seguro y eficiente del vehículo.
Te animamos a que profundices en lo que la gestión de flotas puede aportar a las empresas visitando nuestra web.
También puedes leer algunos casos prácticos donde nuestros clientes dan constancia de cómo la telemática les ha ayudado a reducir costes y a mejorar la seguridad de sus conductores.
Y si este artículo te ha parecido interesante, te recomendamos:
No olvides darnos tu opinión.