Que Amazon ha revolucionado el ecommerce es evidente. Una compañía que consiguió reinventarse y pasar de ser una librería online a ser el gigante del comercio electrónico que es hoy en día es un ejemplo de cómo la innovación y la flexibilidad a la hora de adaptarse a las necesidades de tus clientes son claves para el éxito.
Pero mientras Amazon agitaba el comercio electrónico, de forma colateral también ha impactado en otros sectores. Uno de ellos es el del transporte, primero con la entrega inmediata de paquetes; segundo con nuevos métodos de transporte; tercero, con un nuevo modelo de negocio basado en el control total de la logística.
Hagamos un poco de historia
Hace doce años la compañía presentó Prime, su tarifa plana para envíos de paquetes, que supuso una auténtica revolución. Por una cantidad fija al año (alrededor de unos 20 Euros), los clientes podían recibir de forma gratuita sus paquetes de Amazon. Era una forma fantástica de fidelizar a los clientes.
Unos años más tarde lanzó Prime Now, que permitía recibir las compras en 60 minutos por algo menos de 6 euros o en 2 horas de forma gratuita. Se generó una nueva necesidad para los clientes online: la inmediatez. El resultado es que muchas otras tiendas se subieron al carro de la entrega en dos horas.
Y qué depara el futuro
El año pasado, la compañía de Jeff Bezos anunció Prime-Air, que consiste en un ambicioso programa de entrega de paquetes en menos de treinta minutos. Esto lo consigue mediante drones que se separan de la cabina camión o del medio de transporte que se utilice para hacer efectiva la entrega en la última milla. Aunque, en la actualidad, los compradores aún no tienen la opción de elegirlo como método de transporte, la compañía ya ha realizado pruebas con éxito y se espera que esté disponible en cuanto la normativa de drones en los distintos países lo posibilite.
De hecho, y relacionado con la entrega al cliente, hace unos días Amazon dio un paso más allá y anunció Amazon Key, que mediante una cámara y un cerrojo permitirá al comprador abrir su casa para que el mensajero pueda entregar el paquete aunque su dueño no se encuentre presente en ese momento.
Pero hay más innovaciones en materia de transporte en carretera. Específicamente en el tema de “coches autónomos”. En enero de este año, la oficina de patentes de EEUU admitió la última idea de la compañía: una autopista exclusiva para coches autónomos. La intención es promover un tráfico más fluido y seguro, donde todos los vehículos estarían conectados a la misma red recibiendo las mismas señales.
Todo esto son solo unos ejemplos del gran proyecto logístico de Amazon, que pretende controlar la totalidad del proceso de compra, desde la salida de fábrica del producto hasta la entrega al consumidor final.
Sin duda un viaje lleno de innovación que seguro que depara sorpresas.